Muchos de vosotros estaréis de acuerdo conmigo en que la comunicación de los animales es un tema más que interesante y peculiar. Por ello, hoy os en animales-mascotas profundizamos en este misterioso tema.
A pesar de los prejuicios y las incógnitas sobre el modo de comunicarse entre las distintas especies de animales, cada vez somos más los que tenemos la certeza de que los animales se comunican de un modo u otro.
¿Cómo se comunican los animales?
Uno de los ejemplos más claros de esta afirmación lo podemos ver en las ballenas, las cuales emiten sonidos que se pueden escuchar a miles de kilómetros, pudiendo así comunicarse con cualquier ballena independientemente de lo cerca o lejos que se encuentre. ¿Y qué me decís de la comunicación tan peculiar de los delfines Cada vez se acrecenta el número de personas que no dudan en asegurar que éstos cuentan con su propio lenguaje.
No obstante, ni estos son los únicos animales capaces de comunicarse, ni la emisión de sonidos es el único tipo de comunicación existente. Tanto las personas como los animales nos comunicamos de forma inconsciente, o consciente en algunos casos, con el resto de seres vivos con los que compartimos entorno.
¿Qué tipos de comunicación existen?
A pesar de que todos asociamos en un primer momento la comunicación con el lenguaje verbal o corporal, existen otros tipos de comunicación que debemos tener en cuenta a la hora de analizar la comunicación de una especie tan avanzada como es la del animal.
Un claro ejemplo de la existencia de otras formas de comunicarse, lo podemos ver en el caso de las abejas. A pesar de que son pocas las personas que se cuestionan cómo pueden comunicarse los animales, y aún más pocas las que se paran a cuestionarse cómo las abejas interactúan, éstas son un claro ejemplo de comunicación química a través de feromonas. Aunque os resulte algo extraño y chocante en un primer momento, las abejas, especialmente las reinas, producen de forma habitual feromonas que se mezclan con el medio en el que viven y que influyen en el comportamiento de los animales que viven en su entorno.
No obstante, he comenzado por el tipo de comunicación menos intuitiva. Otro tipo de comunicación de la que todos podemos percatarnos con el simple hecho de prestar atención, es la comunicación gestual que tanto hombres como animales utilizamos en muchas ocasiones, de forma consciente o como respuesta instintiva a un estímulo.
Lo que nosotros llamamos lenguaje no verbal, es mucho más exagerado en el caso de las especies animales, dado que ellos lo hacen en la mayoría de los casos por su instinto. Dentro de este tipo de comunicación se incluye las respuestas que vemos en el cuerpo de un animal cuando el medio en el que desarrolla su actividad se ve alterado por algo o por alguien.
Aunque un caso más claro de ello es el momento de la reproducción, en este caso son las aves las maestras del cortejo. Si nos paramos a ver algún documental sobre este acto, veremos como las aves, con la finalidad de lograr el permiso para acercarse a la pareja, el macho exhibe los mejores colores de su plumaje y realiza una serie de movimientos para impresionar a la hembra.
La danza del cortejo puede durar hasta varias horas y la respuesta positiva por parte de la hembra no está asegurada, por lo que el macho deberá esperar pacientemente hasta ver si la hembra se une o no al baile. En el vídeo podréis ver lo que son capaces las aves de hacer para lograr copular y la alta exigencia de las hembras a la hora de decidirse. Verdaderamente, un auténtico ritual que deja sin palabras.
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El último tipo de comunicación al que estamos más acostumbrados es la comunicación a través del sonido, perfectamente audible para nosotros aunque no comprensible, lo que lo convierte en un verdadero lenguaje.
Nueva forma de comunicación animal
Como ya vimos anteriormente, existen diferentes formas de comunicación animal. Sin embargo, aunque hay varios tipos de ellas, existen otros comportamiento que también se han observado como forma de comunicación animal como lo es a través del olfato.
En este aspecto, el olfato es algo muy natural tanto en los perros como en los gatos y en otro tipo de animales. Incluso las ratas se pueden llegar a comunicar a través de ello.
Según los científicos de la Case Western Reserve de la University School of Medicine en Estados Unidos, han descubierto que a través de la interacción entre las ratas podían ver distintos tipos de comunicación con el olfato. Con ello, de forma similar que sucede con los humanos, son capaces de establecer distintas jerarquías entre las propias ratas para saber de qué clase social pertenece cada una.
Esto sucede porque cuando dos ratas se aproximan, la que olfatea más demuestra una posición de dominio absoluto, lo que hace que la que olfatea menos quede en una postura más subordinada que la anterior e inferior, con lo cual hay probabilidades de que sufra algún tipo de agresión.
Es por ese motivo que los científicos de estos estudios creen que el olfato es una señal que hará no sólo comunicarse entre ellas sino también evitar algunos conflictos generales que puedan surgir.
Este tipo de comportamiento no sólo queda en las ratas, donde se ha visto claramente, sino que también se lleva a otro tipo de animales e incluso, ayuda también a comprender un poco más el comportamiento del cerebro de los humanos, quienes los centros neuronales hacen que para bien o para mal se den distintas señales según la perspectiva que tenemos de la otra persona y sin duda que el olfato forma aquí una parte importante de esta decisión inconsciente que se realiza.
Cabe destacar también que no es una forma de estrategia de comunicación nueva sino que es un mecanismo que lleva años que se está estudiando pero que cada día toma más fuerza, sobre todo cuando se une con otros estilos de comunicación.
A pesar de lo mucho que estamos acostumbrados a ver a los animales comunicarse a través del sonido, sobre todo aquellos que tenéis una mascota en casa, no deja de sorprendernos la ferocidad y la exigencia que muchos sonidos llevan implícitos. Sin duda alguna, los animales hablan entre ellos y se comunican perfectamente.
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