Quizá estés pensando en la posibilidad de tener un nuevo miembro en la familia. Si es así, y estás considerando añadir una nueva mascota, adoptar en lugar de comprar (ya sea en una tienda local o en una tienda minorista online) es siempre la mejor opción. ¿Por qué? Fundamentalmente porque al adoptar un animal de un refugio de animales, un albergue o incluso una tienda, te estás asegurando de no apoyar ni respaldar las inhumanas instalaciones de cría -auténticas fábricas de cachorros- que abastecen a las tiendas de animales.
Y, como beneficio adicional, estás poniendo de tu parte para combatir la grave sobrepoblación de mascotas, y salvar la vida de los animales sin hogar, que muchas veces acaban en una inyección de eutanasia. Pero lo mejor es analizar todas y cada una de sus ventajas, ¿no crees?. Vayamos por partes.
Por qué adoptar una mascota en lugar de comprar
No hay duda: adoptar una mascota tiene muchísimos beneficios, algunos de los cuales, quizá aún, no has considerado del todo. Te ofrecemos -y analizamos- a continuación algunas de las razones por las cuales, todos/as, deberíamos adoptar una mascota. Algo que nos beneficiará no solo a nosotros, sino a toda la familia.
1. Salvarás una vida
Al adoptar de un refugio o un albergue, estás brindando al animal la segunda oportunidad que tantísimo se merece. Muchos han sido rescatados en circunstancias horribles, ya sea por abandono, crueldad… o simplemente sus anteriores dueños no pudieron cuidarlos como consecuencia de una enfermedad o un cambio de situación.
El personal de estos refugios y albergues trabajan incansablemente para cuidarlos, haciendo todo lo posible para que estén preparados para irse a su nuevo hogar. Pero, lamentablemente, no todos son tan afortunados. Al contrario, muchos, terminan sacrificados debido a la falta de espacio, lo que significa que muchos animales sanos acaban perdiendo la vida injustamente.
Al adoptar a ese animal, independientemente de que sea un perro o un gato, podremos brindarle no solo una nueva vida, o una segunda oportunidad, sino un hogar perfectamente estable y amoroso, y además ayudaremos a detener la sobrepoblación.
2. Ahorrarás dinero
Muchos refugios o albergues suelen tener un servicio veterinario especializado en el que se le coloca al animal un microchip (para identificarlo), se le esteriliza, se le castra y se le vacuna. Esto, no hay duda, ofrece un interesante ahorro de dinero que no es necesario pagar. Y, además, garantizarán que la mascota que nos llevamos a casa está sana.
Además, los precios de adoptar una mascota de un refugio o un albergue son muchísimo más bajos que los precios que se pagan al comprar a ese mismo animal en una tienda de animales. Por tanto, nos ahorraremos bastante dinero.
3. Ayudarás a luchar contra las granjas de cachorros y las tiendas de mascotas
No hay nada de malo en una tienda de mascotas, que se encarga de vender todos aquellos accesorios, elementos y la comida necesaria para el animal. El problema está cuando, además, esa misma tienda vende animales de la misma manera que si fueran productos.
Aunque las conocidas como “granjas de cachorros” son en realidad ilegales, ya que es una práctica ilegal de crear cachorros con el único propósito o fin de maximizar las ganancias, sin tener en cuenta tanto su bienestar como su salud, es un negocio oculto que está a la orden del día.
Por tanto, adoptar de un refugio ayudarás a evitar que muchos perros y gatos sean sometidos a circunstancias tan horribles.
4. Mejorará tu salud y te hará más feliz
Varios estudios han demostrado que tener una mascota en casa puede alargar nuestra vida y, además, mejorar tanto nuestra felicidad como la salud en general. Y también ayuda a las personas con depresión, ansiedad, estrés y muchas otras dolencias o enfermedades.
La naturaleza cariñosa y leal de los perros, o la búsqueda de mimos incesantes de los gatos (aunque también sean bastante independientes) ayuda a crear relaciones cercanas con sus dueños y puede ser muy útil para quienes sufren de depresión, quienes, es cierto, pueden sentir que no tienen a nadie más.
Por otro lado, se ha constatado que acariciar a nuestra mascota puede ayudar a reducir los niveles de estrés y de tensión arterial, y jugar con ellos puede aumentar los niveles tanto de serotonina como de dopamina que produce el cuerpo, haciéndonos sentir mucho más tranquilo y relajado.