La belleza del mar y de los lagos puede pasar de las grandes masas de agua a pequeñas porciones, en un salón o en un dormitorio, gracias a las peceras ocupadas por animales marinos que son una maravilla para la vista. Especialmente si tratas con peces vistosos y elegantes, siempre querrás presumir de él.
Aquí en Animalesmascotas, os mostraremos cómo cuidar un pez betta, un pez de lo más llamativo y elegante que sin duda, será el centro de atención de muchos, así que os daremos unas pautas para que se mantenga fuerte y hermoso.
Pez betta
Nos encontramos con un pez no muy común y no sólo por su belleza que es más que obvia o porque es un pez que sale a la superficie a por aire, sino porque es conocido con el nombre de luchador de Siam, un pez que se adapta fácilmente a los diferentes entornos y son omnívoros, comen de todo. Por eso, se ha ganado a pulso ese apodo.
Es un pez de agua dulce de la familia de los laberíntidos, procedente de la cuenca del Mekong, que está en la zona sureste de Asia. Su tamaño no llega a ser espectacular, porque no llega a pedir más de seis centímetros y medio. Su vida se alarga hasta los dos años.
Por supuesto, lo que más destaca de este magnífico pez son sus aletas y los colores que pueden llegar a desplegar. Hay diferentes variedades de peces betta: mariposa, camboyano, veteados… Pero todos destacan por colores vibrantes que se despliegan gracias a sus aletas que son alargadas, anchas y con un efecto frondoso, que hace parecer que es un pez con cabellos de colores.
Por eso, el pez betta, se ha hecho muy popular, por los colores que despliega y la forma en que lo hace, porque al estar en el agua, sus movimientos ondulantes hacen que las aletas sean mucho más llamativas, consigan reflejos imposibles y consiguen hipnotizar a más de uno. Cuando dos machos betta se encuentran, a pesar de que sus ataques por el territorio, pueden ser muy agresivos, despliegan sus aletas, mostrando sus colores, ya que para impresionar a la hembra, muestran su belleza, además, de hacer nidos con burbujas.
Cómo cuidar un pez betta
Si os ha terminado de enamorar este pez, es el momento de descubrir cómo podemos cuidarlo en nuestras casas, para que sea un pez activo y feliz y que no le falte de nada.
Cómo cuidar un pez betta – Pecera
Debido a su procedencia, siempre se ha movido entre grandes masas de agua, por lo que necesitas suministrarle una pecera bastante grande, aunque sea solamente uno, para que pueda moverse con total libertad. No nos vale una típica pecera pequeña y redondeada. El pez betta, necesita más espacio.
Si vas a tener solamente a uno, puedes tenerlo en una pecera grande que admita veinte litros de agua. Tendrá suficiente espacio para que pueda moverse. Si tu idea es tener dos, multiplica los litros para un pez más. Pero te recomendamos que sea una hembra directamente, porque con otro macho, la cosa puede ponerse muy agresiva.
Si lo que quieres es tener a un par de hembras, puedes, por supuesto tenerlas juntas, pero procura que sean dos hembras que se hayan criado desde pequeñas, para que no se vean como una amenaza, la una a la otra, ya que podrían atacarse entre ellas también.
Cómo cuidar un pez betta – Agua
La temperatura a la que debe estar el agua de la pecera debe rondar entre los 22 – 32 grados centígrados, dependiendo de la estación. Cuando vayamos a pasar al pez de la bolsita, cuando lo traemos a la casa, a la pecera, tenemos que tener un especial cuidado. Aunque tengan la misma temperatura, no podemos soltar el pez sobre la pecera y trabajo listo.
Introduciremos la bolsa abierta, en el interior de la pecera, para que vaya entrando poco a poco el agua nueva. La temperatura en el pez se estabilizará y podrá empezar su nueva vida, sin traumas de temperaturas.
Cómo cuidar un pez betta – Alimentación
En las diferentes tiendas de alimentación para animales, podrás encontrar copos o bolitas para alimentar estos peces. También pequeños seres marinos, como camarones, pueden comerlos, así como larvitas de mosquito o gusanitos. Puedes conseguirlos congelados, para que puedan comérselos frescos, cuando se hayan descongelado.
Si les vas a dar copos, sigue las instrucciones para no sobre alimentarlos. Con un pellizco, tres veces al día, por cada pez, estará más que satisfecho.
Cómo cuidar un pez betta – Limpieza
Aunque se trate de agua, eso no significa que está limpio contantemente. Los peces, sueltan sus residuos y los cristales de la pecera se van ensuciando desde el interior.
Para limpiar la pecera, es necesario que cojas a cada uno de ellos y los pases a una cubeta o barreño lleno de agua, que esté a la misma temperatura, con el mismo proceso de la bolsita a la pecera.
Limpiaremos con esponja y un gel específico o un jabón neutro, pero tenemos que asegurarnos que eliminamos todos los restos de jabón. Con limpiarlo una vez a la semana, será más que suficiente, cuando tenemos un pez. Aumentará la frecuencia, cada vez que tengamos más peces en la pecera.
Cómo cuidar un pez betta – Elementos decorativos
Loe elementos decorativos no sólo le darán vida a la pecera, sino que ayudará a que el pez se adapte de manera mucho más rápida a su nuevo entorno.
- Arena fina para el fondo, que sea muy suave, para que no se hagan daño, cuando nadan en el fondo. Aunque le dé un toque muy llamativo, evitaremos las rocas.
- Plantas naturales, como las lentejas de agua, espadas del Amazonas… Son mucho mejores las naturales, porque son mucho más suaves. Las de plástico, al ser rígidas, podrían hacer daño al pez, cuando pasa por allí.
- Crearemos escondites para los peces. Ya sea grande o pequeño, dependiendo de la cantidad de peces, podemos crear pequeños escondites con castillos, cuencos, vasos oscuros, troncos…
Con estos pequeños consejos, ya conocerás un poco cómo es el pez betta y cómo podemos cuidarlo, así que si te animas y quieres una mascota de agua en tu vida, no dudes en opta por este pez tan hermoso.
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